Recuperar las banderas del cordobazo para construir una sociedad más justa

“Es preciso recuperar las banderas del cordobazo para consolidar una organización popular plural, para luchar por una sociedad más justa, ya que el modelo económico aplicado por los últimos gobiernos militar y constitucionales avasallaron los derechos laborales y desarticularon los movimientos obreros”, afirmó a AIM el secretario general de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos, César Baudino, quien señaló que actualmente las escuelas se configuran como espacios de discusión sindical y construcción del conocimiento.

El 29 de mayo de 1969, las barricadas que cerraban calles y abrían nuevos caminos, “eran producto de una larga secuencia histórica que recogió vertientes ideológicas Yrigiyenistas, de Forja, la resistencia peronista, los sindicatos anarquistas y los comunistas y de las influencias de lo que pasaba en el exterior con el Che en Bolivia, la primavera de Praga, el Mayo Francés y la Plaza de México, contra la dictadura de Carlos Onganía, que implementó medidas para abrir los mercados internos a los monopolios internacionales, disolvió partidos políticos e intervino las universidades”.

En ese sentido, Baudino recordó que “la convergencia de estudiantes y obreros que pusieron en jaque a la dictadura fue un gran triunfo de la rebelión popular en Córdoba, que tuvo repercusiones nacionales”.

“Este proceso histórico fue producto de la maduración de esa acumulación intelectual, ideológica y política que se dio en un contexto internacional favorable, ya que todos los hechos realizaron su aporte a la transformación de la sociedad y del capitalismo, para lograr algo distinto y más justo, donde algunos aspiraban a un socialismo nacional, otros al internacional o al comunismo”.

Sin embargo, el docente explicó que en el movimiento obrero argentino “si bien había dirigentes conciliadores existían tendencias más combatidas, porque estaba la CGT de los argentinos, que impulsaban un movimiento para reivindicar sus derechos y cuestionaban las viejas estructuras partidarias y sindicales”...

...En este contexto, “el trabajo de los docentes es muy importante, ya que hay pensadores que plantean que estamos en una etapa postfordista, donde la escuela ocuparía el rol de la fábricas en materia sindical, porque es el espacio donde se discuten las cosas y se construye el conocimiento”. La escuela “debe capitalizar de las demandas barriales, porque las necesidades populares no son solamente de los docentes”...

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