En este momento histórico, dónde por fin se juzga el infame robo de bebés durante la última dictadura militar, acompañamos la lucha por la verdad y la justicia, y ansiamos, junto a la querella encabezada por Sabrina Gullino, el castigo a todos los culpables de éstos delitos de lesa humanidad y el revelamiento de la historia y la identidad de su hermano mellizo.
Estas luchas y estos juicios por la memoria, la verdad y la justicia no sólo rompen con la lógica del supuesto “órden” que iba a imponer el proceso militar, si no que además, patentiza la falsedad de la teoría y el discurso de los “dos demonios” en Argentina. La lesa humanidad fué sólo política de militares y civiles cómplices, delincuentes todos y genocidas.
Que la verdad y la justicia se impongan a las estructuras de la impunidad de ayer y de hoy.
Mauricio Castaldo
Sec DDHH CTA Paraná
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